lunes, 30 de julio de 2018

MOXIBUSTIÓN


                                                                                                                                                                         
 La moxibustión
Es una técnica de la Medicina Tradicional China que utiliza el calor de la artemisa para sanar.  En la antigua China, para mencionar la acupuntura se utilizaban dos ideogramas: el de aguja y el de fuego.
Para la moxibustión utilizamos la hojas de la artemisa secas, molidas y prensadas en forma de puro o moxa.  Su combustión alcanza los 500 y 600 grados centígrados, generando un calor seco de gran calidad terapéutica que se aplica sobre los puntos de acupuntura, meridianos y zonas cogestionadas. Sumando así las propiedades del punto de acupuntura con las propiedades del calor medicinal de dicha planta.
Características de la artemisa
Su composición química contiene cineol, linalol o tuyona, además de taninos, adenina, colina y vitaminas A, B y C. Propiedades:tónica, digestiva, antiinflamatoria, antimicrobiana, analgésica.
Usos de la moxibustión
La moxibustión tiene la propiedad de calentar los meridianos, dispersar el frío y la humedad. También favorece y regula el flujo de la circulación de la sangre y de la energía, además de recuperar el Yang.
 Es eficaz en dolores reumáticos, para mejorar el sistema inmunitario, es analgésica y antinflamatoria, es desintoxicante, regula y activa el metabolismo y el aparato digestivo.   En la antigüedad utilizaban la moxibustión para fortalecer la salud y prevenir las enfermedades.

      Moxibustión directa: se aplican los conos directamente sobre la piel, en el punto elegido; se enciende el primero (con una varilla incienso) y se van quemando conos hasta que el paciente no tolere el calor.
      Moxibustión indirecta: entre la piel y los conos se coloca un elemento intermediario: ajo o jengibre. Se corta una rodajita es estos frutos y se le hacen varios agujeros. Luego sobre éstos se coloca el cono de moxa, que se quemará hasta que el paciente no tolere él calor.  En este tratamiento, aprovechamos las cualidades fungicida y calorífica del ajo y el jengibre.
      Moxibustion con puro de moxa: Con todo, la forma más usada de la artemisa es aquella en que se enrolla como un puro. El puro se enciende y se aproxima a la piel, a una distancia de unos 3 centímetros aproximadamente, durante 3 a 5 minutos. Se va calentando suavemente para que el calor penetre en profundidad hasta que el paciente no tolere el calor.